Uno de los consejos de los ancestros del Tao es: “Mientras más habilidades desarrolla el practicante, más responsabilidades asume”. El desarrollo personal no lo determina el tiempo que lleva practicando, el desarrollo lo determina la capacidad de generar beneficios en el mundo. Desarrollo es una función de anchura de mente y corazón.
La Segunda Caldera del corazón altruista es un puente entre la mente estrecha y egoísta de la Primera Caldera, y la mente infinita de la Tercera Caldera de Mente Original. En la Segunda Caldera, nadie se excluye o se queda fuera. La Segunda Caldera es la compasión al 100% activa en el mundo; no hay compasión como idea o concepto, la compasión es acción.
Mientras el practicante progresa por el Nivel 2, comienza a formar grupo con otros practicantes para asistir a personas necesitadas, lugares en conflictos o ecológicamente en crisis. La ayuda aquí es mutua, al ayudar a otros, los otros nos ayudan a abrir el corazón de la Segunda Caldera.
Los grupos de Sanar con Luz 2, dividen el tiempo de práctica en tres partes: una práctica cotidiana de purificación mental y elevar conciencia, una práctica semanal asistiendo a alguien en crisis y una práctica mensual sanado un lugar en la Tierra.
La práctica de Sanar con Luz 2 se encarga de la responsabilidad universal que tenemos todos con otros seres y la Tierra. Como dijo el gran Hipócrates, el padre de la medicina occidental: “la salud del ser humano depende de la salud de la Tierra”.